martes, 21 de junio de 2022

Lecturas y Santoral 21/06/2022 Martes de la duodécima semana de Tiempo Ordinario

Yo haré de escudo a esta ciudad para salvarla, por mi honor y el de David
Primera Lectura. Segundo libro de los Reyes 19, 9b-11. 14-21. 31-35a. 36

En aquellos días, Senaquerib, rey de Asiria, envió mensajeros a Ezequías, para decirle: «Así hablaréis a Ezequías, rey de Judá: “Que tu Dios, en el que confías, no te engañe diciendo: ‘Jerusalén no será entregada en manos del rey de Asiría.’ Tú mismo has oído cómo han tratado los reyes de Asiria a todos los países entregándolos al anatema ¿y vas a librarte tú solo?”». Ezequías tomó la carta de mano de los mensajeros y la leyó. Subió al templo del Señor y abrió la carta ante el Señor y elevó esta plegaria ante él: «Señor, Dios de Israel, entronizado sobre los querubines: Tú solo eres el Dios para todos los reinos de la tierra. Tú formaste los cielos y la tierra. ¡Inclina tu oído, Señor, y escucha! ¡Abre tus ojos, Señor, y mira! Escucha las palabras de Senaquerib enviadas para insulto del Dios vivo. Es verdad, Señor, los reyes asirios han exterminado las naciones, ha arrojado sus dioses al fuego y los han destruido. Pero no eran dioses, sino hechura de mano humana, de piedra, de madera. Pero ahora, Señor, Dios nuestro, líbranos de sus manos, y sepan todos los reinos de la tierra que solo tú eres Señor Dios». Entonces Isaías, hijo de Amós, envío a Ezequías este mensaje: «Así dice el Señor, Dios de Israel: "He escuchado tu plegaria acerca de Senaquerib, rey de Asiría”. Esta es la palabra que el Señor pronuncia contra él: "Te desprecia, se burla de ti la doncella, hija de Sión, menea la cabeza a tu espalda la hija de Jerusalén. Ha de brotar de Jerusalén un resto, y supervivientes del monte Sión. El celo del Señor del universo lo realizará. Por eso, esto dice el Señor acerca del rey de Asiría: 'No entrará en esta ciudad, no disparará contra ella ni una flecha, no avanzará contra ella con escudos, ni levantará una rampa contra ella. Regresará por el camino por donde vino se volverá y no entrará en esta ciudad - palabra del Señor -. Yo haré de escudo a esta ciudad para salvarla, por mi honor y el de David, mi siervo '"». Aquella misma noche el ángel del Señor avanzó y golpeó en el campamento asirio a ciento ochenta y cinco mil hombres. Senaquerib, rey de Asiria, levantó el campamento, y regresó a Nínive, quedándose allí. 

Palabra de Dios


Salmo Responsorial. 47, 2-3a. 3b-4. 10-11
Dios ha fundado su ciudad para siempre.
Grande es el Señor y muy digno de alabanza en la ciudad de nuestro Dios,
su monte santo, altura hermosa, alegría de toda la tierra. 

Dios ha fundado su ciudad para siempre. 
El monte Sión, confín del cielo, ciudad del gran rey; 
entre sus palacios, Dios descuella como un alcázar. 

Dios ha fundado su ciudad para siempre. 
Oh Dios, meditamos tu misericordia en medio de tu templo: 
como tu renombre, oh Dios, tu alabanza llega al confín de la tierra. 
Tu diestra está llena de justicia. 

Dios ha fundado su ciudad para siempre.
Lo que deseáis que los demás hagan con vosotros, hacedlo con ellos
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. Mateo 7, 6. 12-14
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «No deis lo santo a los perros, ni les echéis vuestras perlas a los cerdos; no sea que las pisoteen con sus patas y después se revuelvan para destrozaros. Así, pues, todo lo que deseáis que los demás hagan con vosotros, hacedlo vosotros con ellos; pues esta es la Ley y los Profetas. Entrad por la puerta estrecha. Porque ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos entran por ellos. ¡Qué estrecha es la puerta y qué angosto el camino que lleva a la vida! Y pocos dan con ellos».

Palabra de Dios


San Luis Gonzaga, Religioso (1568-1591)

Nació el 9 de marzo de 1568 cerca de Mantua (Italia), siendo el heredero del primer marqués de Castiglione. Aunque dio unos primeros pasos de iniciación en la vida militar y aristocrática, muy pronto se sintió inclinado a la vida religiosa.

De 1581 a 1584 estuvo en Madrid como paje del príncipe don Diego, y allí se sintió inspirado a hacerse jesuita. Después de superar la oposición de su padre, renunció a sus derechos en favor de su hermano, ingresó en la Compañía de Jesús en 1585 e inició sus estudios de teología en Roma. Había recibido la primera comunión de manos de san Carlos Borromeo, y en la Compañía tuvo por padre espiritual a san Roberto Belarmino. Su vida fue ejemplo de austeridad y dominio de sí mismo y, sobre todo, de entrega el servicio de los demás.

En 1591 estalló la peste de tabardillo, y Luis se ofreció a asistir a los enfermos. Mientras transportaba a un apestado al hospital, se contagió él mismo. Murió en la enfermería del Colegio Romano en la octava del corpus Christi, entre el 20 y 21 de junio de 1591, a los 23 años de edad. Fue canonizado en 1726.

Oración: Señor Dios, dispensador de los dones celestiales, que has querido juntar en san Luis Gonzaga una admirable inocencia de vida y un austero espíritu de penitencia, concédenos, por su intercesión, que, si no hemos sabido imitarle en su vida inocente, sigamos fielmente sus ejemplos en la penitencia. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

lunes, 20 de junio de 2022

Lecturas y Santoral 20/06/2022 Lunes de la duodécima semana de Tiempo Ordinario

El Señor apartó a Israel de su presencia y solo quedó la tribu de Judá
Primera Lectura. Segundo libro de los Reyes 17, 5-8. 13-15a. 18

En aquellos días, avanzó Salmanasar, rey de Asiria, contra todo el país, comenzando por Samaria, a la que puso sitio durante tres años, hasta que, el año noveno de Oseas, el rey de Asiría la conquistó. Deportó a Israel a Asiria y lo estableció en Jalaj, en el Jabor, río de Gozán, así como en las ciudades de los medos. Esto sucedió porque los hijos de Israel habían pecado contra el Señor, su Dios, que los había sacado de la tierra de Egipto, sustrayéndolos a la mano del faraón, rey de Egipto; porque dieron culto a otros dioses y siguieron las costumbres de aquellas naciones que el Señor había expulsado ante ellos. Pues el Señor había advertido a Israel y a Judá, por boca de todos los profetas y videntes: «Convertíos de vuestros malos caminos y guardad mis mandamientos y decretos, conforme a la ley que prescribí a vuestros padres y que les transmití por mano de mis siervos a los profetas». Pero no hicieron caso, manteniendo dura la cerviz como habían hecho sus padres, que no confiaron en el Señor, su Dios. Despreciaron así sus leyes y la alianza que estableció con sus padres, tanto como las exigencias que les impuso. Y se encolerizó el Señor sobremanera contra Israel, apartándolos de su presencia. Sólo quedó la tribu de Judá. 

Palabra de Dios


Salmo Responsorial. 59, 3. 4-5. 12-13
Que tu mano salvadora, Señor, nos responda. 
Oh Dios, nos rechazaste y rompiste nuestras filas 
estabas airado, pero restáuranos. 

Que tu mano salvadora, Señor, nos responda. 
Has sacudido y agrietado el país: 
repara sus grietas, que se desmorona. 
Hiciste sufrir un desastre a tu pueblo, 
dándole a beber un vino de vértigo. 

Que tu mano salvadora, Señor, nos responda.
Tú, oh Dios, nos has rechazado y no sales ya con nuestras tropas. 
Auxílianos contra el enemigo, que la ayuda del hombre es inútil. 
Con Dios haremos proezas, él pisoteará a nuestros enemigos. 

Que tu mano salvadora, Señor, nos responda.
Sácate primero la viga del ojo
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. Mateo 7,1-5
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «No juzguéis, para que no seáis juzgados. Porque seréis juzgados como juzguéis vosotros, y la medida que uséis, la usarán con vosotros. ¿Por qué te fijas en la mota que tiene tu hermano en el ojo y no reparas en la viga que llevas en el tuyo? ¿Cómo puedes decirle a tu hermano: “Déjame que te saque la mota del ojo”, teniendo una viga en el tuyo? Hipócrita; sácate primero la viga del ojo; entonces verás claro y podrás sacar la mota del ojo de tu hermano» 

Palabra de Dios

San Juan Fischer, Cardenal y Mártir († 1535)

Este santo mártir nació en Beverley, Inglaterra, en el año 1469. A los 14 años ya era el estudiante más sobresaliente y, a los 20 fue nombrado profesor del colegio San Miguel. Se doctoró en la famosa Universidad de Cambridge, y a los 22 años, obtuvo ser dispensado de la falta de edad, y fue ordenado sacerdote. Poco después recibió el nombramiento de vicecanciller o vicerrector de la gran universidad.

En 1504, fue elegido nuestro santo como obispo de Rochester, cuando sólo tenía 35 años. Y él, como hacía con todos los cargos que le confiaban, se dedicó a este oficio con todas las fuerzas de su recia personalidad. Con un entusiasmo no muy frecuente en su época, se dedicó a visitar todas y cada una de las parroquias para observar si cada uno estaba cumpliendo con su deber, y animar a los no muy entusiastas. A los sacerdotes les insistía en la grave responsabilidad de cumplir muy exactamente sus deberes sacerdotales. Iba personalmente a visitar a los más pobres. Dedicaba, además, muchas horas al estudio y a escribir libros. Se hicieron famosos sus discursos fúnebres a la muerte del rey Enrique VII y en el funeral de la reina Margarita.

Aunque era obispo y además canciller de la universidad, llevaba una vida tan austera como la de un monje. No dormía más de seis horas. Hacía fuertes penitencias.

Cuando Lutero empezó a difundir los errores de los protestantes, el obispo Fisher fue elegido para atacar tan fatales errores, y escribió cuatro libros para combatir los errores de los luteranos. En un Sínodo de Inglaterra, el obispo Fisher protestó fuertemente contra la mundanalidad de algunos eclesiásticos, y la vanidad de aquellos que buscaban altos puestos y no la verdadera santidad. Cuando el rey Enrique VIII dispuso divorciarse de su legítima esposa y casarse con su concubina Ana Bolena, el obispo Juan Fisher fue el primero en oponerse. Y aunque muchos altos personajes, por conservar la amistad del rey, declararon que ese divorcio sí se podía hacer, en cambio Juan, aún con peligro de perder sus cargos y ser condenado a muerte, declaró públicamente que el matrimonio católico es indisoluble.

El terrible rey Enrique VIII se declaró jefe supremo de la Iglesia en Inglaterra en reemplazo del Sumo Pontífice, y todos los que deseaban conservar sus altos puestos en el gobierno y en la Iglesia, lo apoyaron. Pero Juan Fisher declaró que esto era absolutamente equivocado y en pleno Parlamento exclamó: “Querer reemplazar al Papa de Roma por el rey de Inglaterra, como jefe de nuestra religión es como gritarle un ‘muera’ a la Iglesia Católica”.

Las amenazas de los enemigos empezaron a llegar sobre él. Dos veces lo llevaron a la cárcel. Otra vez trataron de envenenarlo. Le inventaron toda clase de calumnias, y como no lograron intimidarlo, lo mandaron encerrar en la Torre de Londres. Tenía entonces 66 años.

Estando en prisión, recibió del sumo Pontífice el nombramiento de Cardenal. El impío rey exclamó: “Le mandaron el sombrero de Cardenal, pero no podrá ponérselo, porque yo le mandaré cortar la cabeza”. Y así fue.

El 17 de junio de 1535 le leyeron la sentencia de muerte. El rey Enrique VIII mandaba matarlo por no aceptar el divorcio y por no aceptar que el rey reemplazara al Papa en el gobierno de la Iglesia Católica. Al llegar al sitio donde le van a cortar la cabeza, el venerable anciano se dirige a la multitud y les dice a todos que muere por defender a la Santa Iglesia Católica fundada por Jesucristo. Recita el “Tedeum” en acción de gracias y, muere.

San Silverio Papa y mártir(+ 538)

Nació San Silverio en la provincia de Campania, y fue puesto en la Silla de San Pedro por muerte de Agapito. Depuesto por éste Autimo, patriarca de Constantinopla, deseaba Teodora, mujer del emperador Justiniano, también hereje, que aquél fuese restituido a su silla por Silverio, y al efecto escribió a Belisario, a la sazón en Italia, para que le ayudara en su deseo.

Belisario procuró convencer a Silverio, mas sin conseguirlo, y entonces dio el encargo a su mujer Antonina, por si ella era más feliz. Esta fingió una carta en que Silverio escribía a los godos que les entregaría la ciudad si fuesen a Italia, y con este falso pretexto le desnudaron del hábito pontificial y le vistieron de monje, y con buena guarda le enviaron desterrado a la isla de Poncia, donde, consumido de calamidades, miserias y mal tratamiento, vino a morir.

La Iglesia le celebra como mártir, porque murió en defensa de la justicia.

Fue su dichoso tránsito el día 20 de Junio año de la redención del mundo de 540.

Vigilio, su sucesor, fue menos maleable de lo que esperaba Teodora y acabó renunciando a la cátedra apostólica que había usurpado, aunque a la muerte de Silverio fue elegido canónicamente como papa. Con él Roma tuvo durante un largo periodo una política titubeante e insegura, que acentuaba aún más la firmeza heroica de que había dado muestras Silverio.

Santa Florentina S. VI

Nos encontramos ante un caso verdaderamente prodigioso. Cuatro hermanos santos y reconocidos como tales por la Iglesia: San Leandro, San Isidoro, San Fulgencio y nuestra biografiada Santa Florentina.

Los padres de nuestra santa se llamaron Severiano y Túrtura y supieron educar cristianamente a sus hijos cuyos frutos ahora reconocemos.

Su padre desempeñaba un alto cargo en Cartagena pero por razones políticas parece que hubo de emigrar a Sevilla por el 554.

Aquí continuaron dando maravilloso ejemplo de unión y de vivencia de las virtudes cristianas. Leandro llegará a ser Arzobispo de Sevilla y una vez muertos sus padres, se encargará de formar a sus hermanos menores: Isidoro, que será también Arzobispo de Sevilla y una gran lumbrera de España y San Fulgencio que fue obispo de Écija, así como a S. Florentina.

Su juventud fue tan santa como podía esperarse de aquel hogar donde reinaba el amor y temor santo de Dios. El trabajo y la formación espiritual era a lo que estaban entonces llamadas, especialmente las mujeres de la época visigoda, a la que pertenecen de lleno estos cuatro santos hermanos.

Consagra su virginidad en el monasterio benedictino sevillano de Santa María del Valle, junto a Écija. donde llegaría a ser abadesa y ejemplo y consejo para otros monasterios.

Vale la pena traer aquí los consejos que en un precioso tratado daba San Leandro a su hermana Florentina valiéndose del nombre de su piadosa madre, Turtur, en latín, que significa tórtola en castellano: “No quieras irte del tejado en donde la tórtola tiene sus pequeñuelos. Eres hija de la inocencia, del candor, tú precisamente que tuviste a la tórtola por madre. Pero ama mucho más a la Iglesia, tórtola mística que todos los días te engendra para Cristo. Descanse tu ancianidad en su seno, como antaño descansabas y tu ardor mecías en el regazo de la que cuidó tu infancia."

El mismo San Leandro escribirá para su hermana y las demás monjas de su tiempo un precioso tratado que vendrá a ser como una especie de Regla que influirá grandemente sobre todos los monasterios femeninos de su tiempo.

Le dice entre otras cosas que sea servicial con las hermanas que viven con ella y que procure no hacer sufrir a ninguna. Debe procurar leer y orar continuamente. Cuando tenga que hacer algún trabajo debe procurar que otra le lea algo. Si vive la vida comunitaria, su vida se parecerá a la de los Apóstoles. Debe procurar permanecer siempre en el mismo monasterio. Y un consejo para ella que era superiora: Que sea discreta para saber lo que debe conceder y negar según las necesidades de cada una. Que no tenga peculio, ya que todo en el Monasterio es común. Buenas reglas que siempre procuró vivir Florentina y que viviéndolas llegó a la perfección. Murió por el 636.

Sus reliquias principales se conservan en la catedral de Murcia y en El Escorial. Es Patrona de la diócesis de Plasencia.

sábado, 18 de junio de 2022

Lecturas y Santoral 18/06/2022 Sábado de la undécima semana de Tiempo Ordinario

Zacarías, a quien matasteis entre el santuario y el altar
Primera Lectura. Segundo libro de las Crónicas 24, 17-25

Después de la muerte de Joadá, los jefes de Judá fueron a rendir homenaje al rey, que les hizo caso. Abandonaron el templo del Señor, Dios de sus padres, y sirvieron a los cipos y a los ídolos. Por este pecado la cólera estalló contra Judá y Jerusalén. Les envió profetas para convertirlos al Señor, pero no hicieron caso de sus amonestaciones.
Entonces el Espíritu de Dios vino sobre Zacarías, hijo del sacerdote Joadá, que, erguido ante el pueblo, les dijo:
-"Así dice Dios: '¿Por qué quebrantáis los mandamientos del Señor? ¡No tendréis éxito! Por haber abandonado al Señor, él os abandona'".
Pero conspiraron contra él y, por mandato del rey, lo apedrearon en el atrio del templo del Señor. El rey Joás, olvidándose del amor que le profesaba Joadá, mató al hijo de este, que murió diciendo:
-"¡Que lo vea el Señor y lo demande!".
Al cabo de un año, un ejército de Siria se dirigió contra Joás, invadió Judá y Jerusalén, mató a todos los jefes del pueblo y envió todo el botín al rey de Damasco.
Aunque el ejército de Siria contaba con poca gente, el Señor le entregó un ejército enorme, por haber abandonado al Señor, Dios de sus padres. Así se hizo justicia con Joás.
Al marcharse los sirios, dejándolo con múltiples dolencias, sus servidores conspiraron contra él para vengar al hijo del sacerdote Joadá.
Hirieron a Joás en la cama y murió.
Fue sepultado en la Ciudad de David, pero no en el panteón real.

Palabra de Dios


Salmo Responsorial. 88, 4-5. 29-30. 31-32. 33-34
Le mantendré eternamente mi favor.
Sellé una alianza con mi elegido,
jurando a David, mi siervo:
Te fundaré un linaje perpetuo,
edificaré tu trono para todas las edades.

Le mantendré eternamente mi favor.
Le mantendré eternamente mi favor,
y mi alianza con él será estable.
Le daré una posteridad perpetua
y un trono duradero como el cielo.

Le mantendré eternamente mi favor.
Si sus hijos abandonan mi ley
y no siguen mis mandamientos,
si profanan mis preceptos
y no guardan mis mandatos.

Le mantendré eternamente mi favor.
Castigaré con la vara sus pecados
y a latigazos sus culpas.
Pero no les retiraré mi favor
ni desmentiré mi fidelidad.

Le mantendré eternamente mi favor.
No os agobiéis por el mañana
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. Mateo 6, 24-34
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
- "Nadie puede servir a dos señores. Porque despreciará a uno y amará al otro; o, al contrario, se dedicará al primero y no hará caso del segundo. No podéis servir a Dios y al dinero.
Por eso os digo: no estéis agobiados por vuestra vida, pensando qué vais a comer o beber, ni por vuestro cuerpo pensando con qué os vais a vestir. ¿No vale más la vida que el alimento, y el cuerpo que el vestido? Mirad los pájaros del cielo: no siembran ni siegan, ni almacenan y, sin embargo, vuestro Padre celestial los alimenta. ¿No valéis vosotros más que ellos?
¿Quién de vosotros, a fuerza de agobiarse, podrá añadir una hora al tiempo de su vida?
¿Por qué os agobiáis por el vestido? Fijaos cómo crecen los lirios del campo: ni trabajan ni hilan. Y os digo que ni Salomón, en todo su fasto, estaba vestido como uno de ellos. Pues, si a la hierba, que hoy está en el campo y mañana se arroja al horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más por vosotros, gente de poca fe? No andéis agobiados, pensando qué vais a comer, o qué vais a beber, o con qué os vais a vestir. Los paganos se afanan por esas cosas. Ya sabe vuestro Padre celestial que tenéis necesidad de todo eso.
Buscad sobre todo el reino de Dios y su justicia; y todo esto se os dará por añadidura. Por tanto, no os agobiéis por el mañana, porque el mañana traerá su propio agobio. A cada día le bastan sus disgustos".

Palabra de Dios

Santa Juliana de Falconieri, Fundadora de las religiosas terciarias servitas (1270-1341)

Sobrina de San Alejo Falconieri, tuvo la dicha de ser dirigida espiritualmente por San Felipe Benicio. Nació en Florencia en el año 1270, y provenía de una noble y rica familia. De niña acostumbraba pasar largos ratos rezando en el templo donde fue descubriendo su verdadera vocación, y a los 15 años decidió ingresar a la orden Terciaria de los Siervos de María.

Santa Juliana permaneció en la casa de su madre, pero observando una conducta tan religiosa y tan santa como la de una fervorosa religiosa. Otras jovencitas, que también sentían un llamado especial a la vida religiosa, les agradó este modo de practicar la vida consagrada y siguieron su ejemplo, llevando todas como distintivo un manto sobre la cabeza. Como el número de muchachas creció muy rápido, se formó la asociación de "Siervas de la Virgen María", de la cual, Santa Juliana fue la superiora durante 35 años.

La santa se caracterizó por su bondad, caridad, amabilidad y sobre todo por buscar el bien de todas las almas; pasaba largas horas en constante oración y sus ayunos casi diarios los ofrecía como penitencia para la conversión de las almas pecadoras.

Falleció a la edad de 71 años, de una severa infección estomacal. En su sepulcro se obraron numerosos milagros.

viernes, 17 de junio de 2022

Lecturas y Santoral 17/06/2022 Viernes de la undécima semana de Tiempo Ordinario

Ungieron a Joás, y gritaron: ¡Viva el rey!
Primera Lectura. Segundo libro de los Reyes 11, 1-4.9-18. 20

En aquellos días, la madre del rey Ocozías, Atalía, vio que su hijo había muerto, se dispuso a eliminar a toda la estirpe real. Pero Josebá, hija del rey Jorán y hermana de Ocozías, tomó a Joás, hijo de Ocozías, de entre los hijos del rey que estaban siendo asesinados, lo escondió y lo instaló, a él y a su nodriza, en su dormitorio, manteniéndolo ocultó a la vista de Atalía y así no lo mataron. Estuvo seis años con ella, escondido en el templo del Señor, mientras Atalía reinaba en el país.
El séptimo año, el sacerdote Yehoyadá mandó buscar a los centuriones de los carios y de los guardias y los condujo junto a sí al templo del Señor para establecer un pacto con ellos y hacerles prestar juramento. Luego les presentó al hijo del rey.
Los centuriones cumplieron cuando Yehoyadá les ordenó. Cada uno tomó sus hombres, los que entraban y salían de servicio el sábado, y se presentaron al sacerdote. Yehoyadá entregó a los centuriones las lanzas y los escudos del rey David que había depositado en el templo del Señor.
Los guardias se apostaron, arma en mano, desde el extremo sur hasta el extremo norte del templo, ante el altar y el templo, en torno al rey, por un lado y por otro.
El sacerdote hizo salir al hijo del monarca y le impuso la diadema y las insignias reales. Luego lo proclamaron rey y lo ungieron. Aplaudieron y gritando:
-"¡Viva el rey!"
Cuando Atalía oyó el griterío de los guardias y del pueblo, se fue hacia la muchedumbre que se hallaba en el templo del Señor. Miró y vio al rey de pie junto a la columna, según la costumbre: los jefes con sus trompetas con él, y a todo el pueblo de la tierra en júbilo, tocando sus instrumentos.
Atalía rasgó entonces sus vestiduras y gritó:
-"¡Traición, traición!".
Entonces el sacerdote Yehoyadá dio orden a los jefes de las tropas:
-"Hacedla salir de entre las filas. Quien la siga será pasado a espada" (pues el sacerdote pensaba: 'No debe ser ejecutada en el templo del Señor')
Le abrieron paso y, cuando entró en el palacio real por la puerta de los Caballos, fue ejecutada.
Luego Yehoyadá hizo una alianza entre el Señor, el rey y el pueblo, por la que el pueblo se convertía en pueblo del Señor; hizo también una alianza entre el rey y el pueblo.
Y todo el pueblo de la tierra acudió al templo de Baal para derribarlo. Hicieron pedazos sus altares e imágenes, y ejecutaron a Matán, sacerdote de Baal, frente a los altares.
El sacerdote puso entonces centinelas en el templo del Señor. Toda la población de la tierra exultaba de júbilo y la ciudad quedó tranquila: Atalía ya había muerto a espada en palacio.

Palabra de Dios


Salmo Responsorial. 131, 11. 12. 13-14. 17-18
El Señor ha elegido a Sión, para vivir en ella.
El Señor ha jurado a David
una promesa que no retractará:
"A uno de tu linaje
pondré sobre tu trono".

El Señor ha elegido a Sión, para vivir en ella.
"Si tus hijos guardan mi alianza
y los mandatos que les enseño,
también sus hijos, por siempre,
se sentarán sobre tu trono."

El Señor ha elegido a Sión, para vivir en ella.
Porque el Señor ha elegido a Sión,
ha deseado vivir en ella:
"Ésta es mi mansión por siempre,
aquí viviré porque la deseo".

El Señor ha elegido a Sión, para vivir en ella.
"Haré germinar el vigor de David,
enciendo una lámpara para mi Ungido.
A sus enemigos los vestiré de ignominia,
sobre él brillará mi diadema".

El Señor ha elegido a Sión, para vivir en ella.
Donde está tu tesoro, allí está tu corazón
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. Mateo 6, 19-23
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
-"No atesoréis para vosotros tesoros en la tierra, donde la polilla y la carcoma los roen y donde los ladrones abren boquetes y los roban. Haceos tesoros en el cielo, donde no hay polilla ni carcoma que los roen, ni ladrones que abren boquetes y roban. Porque donde está tu tesoro, allí estará tu corazón.
La lámpara del cuerpo es el ojo. Si tu ojo está sano, tu cuerpo entero tendrá luz; pero si tu ojo está enfermo, tu cuerpo entero estará a oscuras. Si, pues, la luz que hay en ti está oscura, ¡cuánta será la oscuridad!".

Palabra de Dios.


San Rainiero de Pisa Ermitaño (1118-1161)

Nació en Pisa, Italia, en el seno de una familia de nobles y de comerciantes acaudalados.

Sus padres fueron Gandulfo Scacceri y Mingarda Buzzacherini, quienes, deseosos de impartirle una educación religiosa, encomendaron a su único hijo con un sacerdote educador.

Sin embargo Rainiero era un joven con aptitudes naturales para la música, y con un gusto igualmente natural para las diversiones y la vida licenciosa. Ni siquiera sus padres fueron capaces de hacerle cambiar de actitud para dedicarse al estudio.

A los 19 años, empero, quiso Dios que conociera a un eremita de Córcega de nombre Alberto, que se había establecido en el monasterio pisano de San Vito. Rainiero sintió identificación inmediata con ese modelo, y su vida cambió completamente al abrazar la fe y embarcarse rumbo a Tierra Santa.

A los 23 años San Rainiero tomo la decisión de vivir en austeridad absoluta. Todas sus riquezas las repartió entre los pobres, y se retiró a vivir entre los ermitaños de Tierra Santa, sustentándose exclusivamente de limosnas y alimentándose sólo dos veces a la semana. Durante este periodo San Rainiero sometió su cuerpo a grandes sacrificios.

Precedido por una fama de santidad, San Rainiero regresó a Pisa en 1154, luego de más de diez años de ausencia. En su ciudad natal continuó obrando los mismos milagros que había realizado en Tierra Santa, con lo que se ganó la veneración de sus conciudadanos. Ahí fue donde falleció en 1161.

En 1632, San Rainiero fue nombrado patrono principal de la diócesis y de la ciudad de Pisa. Su cadáver incorrupto puede apreciarse todavía en la catedral de dicha ciudad, resguardado por un féretro de vidrio.

San Gregorio Barbarigo Cardenal y Obispo de Padua

San Gregorio nació en Venecia en 1625. Al cumplir los veinte años fue escogido por el gobierno veneciano como acompañante del embajador Luigi Contarini, al famoso Congreso de Munster, donde los representantes de Alemania, Francia y Suecia, firmaron el tratado de Westfalia, el 24 de octubre de 1648, y así pusieron fin a la guerra de Treinta Años.

En 1657, el Papa Alejandro VII, le nombró obispo de Bérgamo y en 1660, le consagró cardenal; cuatro años más tarde, fue transferido al obispado de Padua.

Era benigno y misericordioso, su piedad se mostraba sobre todo a los que sufrían o estaban en desgracia. Con el propósito de fomentar la cultura, fundó un colegio y un seminario que tuvieron gran renombre. A las dos instituciones las dotó con imprenta propia y una biblioteca bien surtida, particularmente con los escritos de los Padres de la Iglesia y los estudios sobre las Sagradas Escrituras.

San Gregorio Barbarigo murió el 15 de junio de 1697 y fue beatificado en 1761 y canonizado por S.S. Juan XXIII, el 26 de mayo de 1959.

jueves, 16 de junio de 2022

Lecturas y Santoral 16/06/2022 Jueves de la undécima semana de Tiempo Ordinario

Elías fue arrebatado en el torbellino, y Eliseo se llenó de su espíritu
Primera Lectura. Eclesiástico 48, 1-15

Surgió el profeta Elías como un fuego, su palabra quemaba como una antorcha. Él hizo venir sobre ellos el hambre, y con su celo los diezmó. Por la palabra del Señor cerro los cielos y también hizo caer fuego tres veces. ¡Qué glorioso fuiste, Elías, con tus portentos! ¿Quién puede gloriarse de ser como tú? Tú despertaste a un cadáver de la muerte y del abismo, por la palabra del Altísimo; tú precipitaste reyes a la ruina y arrebataste del lecho a hombres insignes; en el Sinaí escuchaste palabras de reproche y en el Horeb sentencias de castigo; tú ungiste reyes vengadores y profetas para que te sucedieran; fuiste arrebatado en un torbellino ardiente, en un carro de caballos de fuego; tú fuiste designado para reprochar los tiempos futuros, para aplacar la ira antes de que estallara, para reconciliar a los padres con los hijos y restablecer las tribus de Jacob. Dichosos los que te vieron y se durmieron en el amor, porque también nosotros viviremos. Cuando Elías fue arrebatado en el torbellino Eliseo se llenó de su espíritu. Durante su vida ningún príncipe lo hizo temblar, nadie pudo dominarlo. Nada era imposible para él, incluso muerto, su cuerpo profetizó. Durante su vida realizó prodigios, y después de muerto fueron admirables sus obras. 

Palabra de Dios


Salmo Responsorial. 96, 1-2. 3-4. 5-6. 7
Alegraos, justos, con el Señor. 
El Señor reina, la tierra goza, 
se alegran las islas innumerables. 
Tiniebla y nube lo rodean,
justicia y derecho sostienen su trono. 

Alegraos, justos, con el Señor. 
Delante de él avanza fuego, 
abrasando en torno a los enemigos; 
sus relámpagos deslumbran el orbe, 
y, viéndolos, la tierra se estremece.

Alegraos, justos, con el Señor. 
Los montes se derriten como cera ante el señor, 
ante el Señor de toda la tierra; 
los cielos pregonan su justicia, 
y todos los pueblos contemplan su gloria. 

Alegraos, justos, con el Señor. 
Los que adoran estatuas se sonrojan, 
los que ponen su orgullo en los ídolos. 
Adoradlo todos sus ángeles. 

Alegraos, justos, con el Señor.
Vosotros orad así
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. Mateo 6, 7-15
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Cuando recéis, no uséis muchas palabras, como los gentiles, que se imaginan que por hablar mucho les harán caso. No seáis como ellos, pues vuestro Padre sabe lo que os hace falta antes que lo pidáis. Vosotros orad así: “Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo, danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal”. Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, también os perdonará vuestro Padre celestial, pero si no perdonáis a los hombres, tampoco vuestro Padre perdonará vuestras ofensas». 

Palabra de Dios


Beata María Teresa Scherer

Fundadora, con el capuchino P. Teodosio Fiorentini, de las Franciscanas de la Caridad de la Santa Cruz de Ingenbohl. Nació el año 1825 en Meggen (Cantón de Lucerna, Suiza). A los 17 años fue admitida en la Tercera Orden de san Francisco y, durante una peregrinación a Einsiedeln, se sintió llamada a la vida religiosa.

En 1845 ingresó en el instituto fundado por el P. Teodosio, dedicado primero a la enseñanza y luego también a los enfermos y a los pobres. En 1855 falleció el fundador y ella tuvo que responsabilizarse del Instituto, superando situaciones tensas y conflictivas que le causaron muchos sufrimientos.

Elegida superiora general, orientó con acierto a sus hermanas al servicio de la escuela y de los pobres. La Congregación se extendió por Europa y tenía 422 casas y más de 1500 religiosas cuando el 16 de junio de 1888 falleció la fundadora en Ingenbohl. La beatificó Juan Pablo II en 1995.

Julita y Quirico

Julita (o Julieta) y su hijo Quirico (o Quirce) eran cristianos naturales de Licaonia (Asia Menor) que emigraron a Tarso huyendo de la persecución decretada por el emperador Diocleciano.

La tradición cristiana relata que en el año 303 fueron detenidos por el gobernador Domiciano, y que el pequeño Quirce murió por llorar durante el martirio de su madre, asesinado con brutalidad por el propio juez que vigilaba el cumplimiento de la sentencia.

Ambos cadáveres fueron arrojados a una fosa común, de donde unos cristianos, según tradición, los sacaron para darles sepultura venerable. Son considerados abogados de los pobres y de los niños y su fiesta se celebra el 16 de junio.

San Aureliano de Arlés

Elegido obispo de Arlés (Francia) el año 546, el papa Vigilio lo honró con el palio y lo nombró vicario papal para la Galia. Fomentó la vida monástica y fundó dos monasterios, el uno masculino y el otro femenino, y les dio una Regla estricta y severa, inspirada en la de san Cesáreo.

Defendió con firmeza la fe católica proclamada en los Concilios y participó en la famosa cuestión de los "Tres Capítulos". Murió en Lyon el año 551.

miércoles, 15 de junio de 2022

Lecturas y Santoral 15/06/2022 Miércoles de la undécima semana de Tiempo Ordinario

De pronto, un carro de fuego los separó, y subió Elías al cielo
Primera Lectura. Segundo libro de los Reyes 2. 1. 6-14

Cuando el Señor iba a arrebatar a Elías al cielo en la tempestad Elías y Elíseo partieron de Guilgal. Llegaron a Jericó, y Elías dijo a Elíseo: «Quédate aquí, porque el Señor me envía solo al Jordán». Eliseo volvió a responder: «¡Vive Dios! ¡Por tu vida, no te dejaré!»; y los dos continuaron el camino. Cincuenta hombres de la comunidad de los profetas iban también de camino y se pararon frente al río Jordán, a cierta distancia de Elías y Eliseo, los cuales se detuvieron a la vera del Jordán. Elías se quitó el manto, lo enrolló y golpeó con él las aguas. Se separaron estas a un lado y a otro, y pasaron ambos sobre terreno seco. Mientras cruzaban, dijo Elías a Elíseo: «Pídeme lo que quieras que haga por ti antes de que sea arrebatado de tu lado». Eliseo respondió: «Por favor, que yo reciba dos partes de tu espíritu». Respondió Elías: «Pides algo difícil, pero si alcanzas a verme cuando sea arrebatado de tu lado, pasarán a ti; sino, no pasarán». Mientras ellos iban conversando por el camino, de pronto, un carro de fuego con caballos de fuego los separó a uno del otro. Subió Elías al cielo en la tempestad. Eliseo lo veía y clamaba: «¡Padre mío, padre mío! ¡Carros y caballería de Israel!». Al dejar de verlo, agarró sus vestidos y los desgarró en dos. Recogió el manto que había caído de los hombros de Elías, volvió al Jordán y se detuvo a la orilla. Tomó el manto que había caído de los hombros de Elías y golpeó con él las aguas, pero no se separaron. Dijo entonces: «¿Dónde está el Señor, el Dios de Elías?». Golpeó otra vez las aguas, que se separaron a un lado y a otro, y pasó Eliseo sobre terreno seco. 

Palabra de Dios


Salmo Responsorial. 30, 20. 21. 24
Sed valientes de corazón, los que esperáis en el Señor.
Qué bondad tan grande, Señor, reservas para tus fieles, 
y concedes a los que a ti se acogen a la vista de todos. 

Sed valientes de corazón, los que esperáis en el Señor. 
En el asilo de tu presencia los escondes de las conjuras humanas; 
los ocultas de tu tabernáculo, frente a las lenguas pendencieras. 

Sed valientes de corazón, los que esperáis en el Señor. 
Amad al Señor, fieles suyos; el Señor guarda a sus leales, 
y a los soberbios les paga con creces.

Sed valientes de corazón, los que esperáis en el Señor.
Tu Padre, que ve en lo escondido, te recompensará
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. Mateo 6, 1-6- 16-18
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Cuidad de no practicar vuestra justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos; de lo contrario, no tenéis recompensa de vuestro Padre celestial. Por tanto, cuando hagas limosna, no mandes tocar la trompeta ante ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y por las calles para ser honrados por la gente; en verdad os digo que ya han recibido su recompensa. Tú, en cambio, cuando hagas limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha; así tu limosna quedará en secreto y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. Cuando oréis, no seáis como los hipócritas, a quienes les gusta orar de pie en las sinagogas y en las esquinas de las plazas, para que los vean los hombres. En verdad os digo que ya han recibido su recompensa. Tú, en cambio, cuando ores, entra en tu cuarto, cierra la puerta y ora a tu Padre, que está en lo secreto, y tu Padre, que ve en lo secreto, te lo recompensará. Cuando ayunéis, no pongáis cara triste, como los hipócritas que desfiguran sus rostros para hacer ver a los hombres que ayunan. En verdad os digo que ya han recibido su paga. Tú, en cambio, cuando ayunes, perfúmate la cabeza y lávate la cara, para que tu ayuno lo note, no los hombres, sino tu Padre, que está en lo escondido; y tu Padre, que ve en lo escondido, te recompensará». 

Palabra de Dios


Santa María Micaela del Santísimo Sacramento

Nació en Madrid de familia noble el año 1809. Recibió una esmerada educación y tuvo que llevar una vida de sociedad acorde con su rango, que sabía armonizar con una intensa vida religiosa. El amor a Cristo en la Eucaristía y a la Virgen fue el alma de su vida y de su obra. Renunció a las grandezas nobiliarias y a su porvenir como Vizcondesa de Jorbalán, para consagrarse a la educación de la juventud inadaptada socialmente.

Fundó la Congregación de Adoratrices Esclavas del Santísimo Sacramento y de la Caridad. Realizó un bien inmenso a la juventud extraviada o en riesgo de extraviarse. Murió en Valencia, víctima de su caridad, al atender a los enfermos de cólera, el 24 de agosto de 1865.

Su memoria se celebra el 15 de junio, día de sus votos perpetuos. Fue canonizada en 1934.

Oración: Oh Dios, que amas a los hombres y concedes a todos tu perdón, suscita en nosotros un espíritu de generosidad y de amor que, alimentado y fortalecido por la eucaristía, a imitación de santa María Micaela, nos impulse a encontrarte en los más pobres y en los más necesitados de tu protección. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

San Amós

Es uno de los llamados "Profetas menores" del Antiguo Testamento, que vivió en el siglo VIII antes de Cristo, en tiempo del rey Jeroboam II (786-746 a. C.). Era pastor y cultivador de higueras en Técoa, junto a Belén, y Dios lo llamó y lo envió a los hijos de Israel para reafirmar la justicia y santidad del Señor contra sus prevaricaciones.

Fustigó de palabra y por escrito con energía la vida del reino de Israel que, en tiempo de prosperidad, había abandonado la ley divina. Amós le profetizó el castigo divino y la salvación de unos pocos justos que perpetuarían el pueblo de Dios. Tuvo el mérito, que lo hace muy actual, de denunciar el culto reducido a meras exterioridades y la falsa seguridad de los hombres frente a Dios.

martes, 14 de junio de 2022

Lecturas y Santoral 14/06/2022 Martes de la undécima semana de Tiempo Ordinario

Has hecho pecar a Israel
Primera Lectura. Primer libro de los Reyes 21, 17-29

Después que hubo muerto Nabot, la palabra del Señor llegó a a Elías tesbita para decirle: «Levántate, baja al encuentro de Ajab, rey de Israel, que está en Samaria. Ahora se encuentra en la viña de Nabot, adonde ha bajado para tomar posesión de ella. Le hablarás diciendo: “Así habla el Señor: ¿Has asesinado, y pretendes tomar posesión? Por esto, así habla el Señor: En el mismo lugar donde los perros han lamido la sangre de Nabot, lamerán los perros también tu propia sangre”» Entonces Ajab se dirigió a Elías diciendo: «Así que has dado conmigo, enemigo mío» Respondió Elías: «He dado contigo. Así, por haberte vendido, haciendo el mal a los ojos del Señor, yo mismo voy a traer sobre ti el desastre. Barreré tu descendencia y exterminaré en Israel a todos los varones de la familia de Ajab, del primero al último. Dispondré de tu casa como la de de Jeroboán, hijo de Nebat, y de la de Baasá, hijo de Ajías, por la irritación que me has producido y por haber hecho pecar a Israel. También contra Jezabel ha hablado el Señor diciendo: "Los perros devorarán a Jezabel en el campo de Yezrael", y lo perros devorarán a los de Ajab que mueran en la ciudad y las aves del cielo a los que mueran en el campo». No hubo otro como Ajab que, instigado por su mujer Jezabel, se vendiera para hacer el mal a los ojos del Señor. Actuó del modo más abominable, yendo tras los ídolos, procediendo en todo como los amorreos a quienes el Señor había expulsado frente a los hijos de Israel. Ajab, al oír estas palabras, rasgó sus vestiduras, se echó un sayal sobre el cuerpo y ayunó. Con el sayal puesto se acostaba y andaba pesadamente. Llegó a Elías tesbita la palabra del Señor: «¿Has visto cómo se ha humillado Ajab ante mí? No traeré el mal en los días de su vida, por haberse humillado ante mí, sino en vida de su hijo». 

Palabra de Dios

Salmo Responsorial. 50, 3-4. 5-6a. 11 y 16
Misericordia, Señor: hemos pecado. 
Misericordia, Dios mío, por tu bondad, 
por tu inmensa compasión borra mi culpa;
lava del todo mi delito, limpia mi pecado.

Misericordia, Señor: hemos pecado. 
Pues yo reconozco mi culpa, 
tengo siempre presente mi pecado: 
contra ti, contra ti solo pequé, 
cometí la maldad en tu presencia. 

Misericordia, Señor: hemos pecado. 
Aparta de mi pecado tu vista, 
borra en mí toda culpa. 
Líbrame de la sangre, oh Dios, Dios, Salvador mío,
y cantará mi lengua tu justicia. 

Misericordia, Señor: hemos pecado.
Amad a vuestros enemigos
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. Mateo 5, 43-48
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Habéis oído que se dijo: “Amarás a tu prójimo y aborrecerás a tu enemigo”. Pero yo os digo: amad a vuestros enemigos y rezad por los que os persiguen, para que seáis hijos de vuestro Padre celestial, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos. Porque, si amáis a los que os aman, ¿qué premio tendréis? ¿No hacen lo mismo también los publicanos? Y si saludáis sólo a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los gentiles? Por tanto, sed perfectos, como vuestro Padre celestial es perfecto». 

Palabra de Dios


San Metodio de Constantinopla (790-847)

Nació en Sicilia y se hizo monje en la isla de Chio (mar Egeo). San Nicéforo, patriarca de Constantinopla, lo llamó a sí y lo tuvo de colaborador personal suyo.

Era el tiempo de las polémicas en torno al culto de las imágenes. El emperador iconoclasta León V el Armenio depuso a Nicéforo, y Metodio huyó a Roma para informar al papa Pascual I; allí recibió la ordenación sacerdotal.

Cuando murió León, el Papa envió a Metodio a Constantinopla con una carta para el nuevo emperador, pero de inmediato fue detenido y desterrado, y así permaneció siete años. La emperatriz santa Teodora restableció el culto de los santos iconos. Metodio fue nombrado patriarca de Constantinopla el año 842 y celebró con toda solemnidad el triunfo de la recta fe.

En su gobierno tuvo que afrontar la difícil situación interna de la Iglesia. Había obispos y abades afectos a las ideas iconoclastas; los destituyó, pero encontró enemigos a la hora de proveer las sedes vacantes, que incluso lo calumniaron.

Murió el 14 de junio del año 847.

San Eliseo profeta

San Eliseo profeta bíblico, compañero y seguidor del profeta Elías, al que sucedió, cuando Dios se llevó a Elías a las alturas montado en un carro de fuego.

Vivió Eliseo en el siglo IX antes de Jesucristo. Al suceder a Elías, éste le dejó como recuerdo su manto, para expresar de este modo la protección que ejercería sobre él. Los dos libros de los Reyes nos proporcionan, en la Biblia, mucha información acerca de Eliseo, que combatió la extensión de la idolatría.

En su vida realizó diversos hechos prodigiosos, como sanar las aguas, multiplicar el aceite de la viuda, devolver la vida al hijo de una sunamita, purificar la olla, alimentar a los profetas, sanar la lepra de Naamán, proveer de alimentos en estados de sitio a ciudades israelitas, predecir al rey la victoria final sobre Siria. Incluso después de muerto siguió realizando prodigios: al contacto de sus huesos, revivió el cadáver de un moabita que por error estaban enterrando en la sepultura de Eliseo. Intervino en la corte, como consejero del rey de Israel.

Fuera del país se mostró ardiente defensor del culto de Yahvé. La iconografía cristiana se ha ocupado repetidamente de Eliseo: aparece representado con frecuencia al ilustrar la vida de su maestro Elías, en miniaturas para Biblias y en el sarcófago del museo de Arles. También aparece en la estatua del crucero norte de la catedral de Chartres. Asimismo tenemos un bajorrelieve del profeta, realizado por Berruguete, en la sillería del coro de la catedral toledana, y cuadros de sus milagros más famosos por Benjamin West (Londres) y el esmalte del Mosa del siglo XII, hoy en Londres.