Blaise Pascal (1623 – 1662)
"El corazón tiene razones que la razón desconoce".
Resulta muy difícil poner por escrito el camino interior de la conversión pues exige percibir a cada paso lo que sucede y conservarlo con claridad en la memoria.
Resulta muy difícil poner por escrito el camino interior de la conversión pues exige percibir a cada paso lo que sucede y conservarlo con claridad en la memoria.
Si quien ha dejado tan íntimo testimonio es una persona con "vida intelectual" llama especialmente la atención por la capacidad que brinda para contemplar en detalle las circunstancias que han llevado a ese momento importante.
Blaise Pascal (1623 – 1662), uno de los fundadores del cálculo matemático de probabilidades, llamó a esa fotografía instantánea de su encuentro definitivo con Dios, "El Memorial", y llevó ese testimonio cosido al forro de su chaleco durante los últimos 8 años de su vida.
AÑO DE GRACIA DE 1654
Lunes 23 de noviembre, día de San Clemente papa y mártir y otros del martirologio. Víspera de San Crisógono mártir y otros santos.
Desde las diez y media de la noche aproximadamente hasta casi las doce y media
FUEGO
Dios de Abrahán, de Isaac y de Jacob, no de los filósofos ni de los sabios.
Certeza, certeza. Sentimiento. Alegría. Paz
Dios de Jesucristo.
Deum meum et Deum vestrum.
“Tu Dios será mi Dios.”
Olvido del mundo y de todo, menos de Dios.
Sólo se le encuentra por los caminos enseñados en el Evangelio.
Grandeza del alma humana.
“Padre justo, el mundo no te ha conocido, pero yo te he conocido.”
Alegría, alegría, alegría, lágrimas de alegría
Me he separado de él:
Dereliquerunt me fontem aquae vivae.
“Dios mío, ¿me abandonarás tú?”
Que no me separe de él eternamente.
¡Esta es la vida eterna, que te conozcan a ti, único verdadero Díos, y al que tú has enviado, Jesucristo.”
Jesucristo.
Jesucristo.
Jesucristo.
Yo me he separado de él; le he huido, he renunciado a él, le he crucificado.
Que no sea jamás separado de él.
Sólo se le conserva por los caminos enseñados en el Evangelio.
Renunciación total y dulce.
Sumisión total a Jesucristo y a mi director.
Alegría eterna por un día de fatiga sobre la tierra.
Non obliviscar sermones tuos. Amén.
Amos estas palabras tanto. You can see I have had help from the translator to read & write. These words make the face of Jesus rise up before my mind's eye, how I love this shining example of conversion, showing how the end of all intellectual pursuits, at the source of all wisdom, is God.
ResponderEliminarYour thoughts are so beautiful & well articulated, I can only be sorry at how great my loss is to lose the chance to comprehend the fullness of their meaning in the original language.
Thank you very much for your comment Erin. I think like you, I love this example of conversion and your words resume the feeling perfectly: "showing how the end of all intellectual pursuits, at the source of all wisdom, is God."
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