También yo soy israelita, descendiente de Abrahán, de la tribu de Benjamín.
Primera Lectura. Carta del Apóstol san Pablo a los Romanos (11,1-2a.11-12.25-29)
¿Habrá Dios desechado a su pueblo? De ningún modo. También yo soy israelita, descendiente de Abrahán, de la tribu de Benjamín. Dios no ha desechado al pueblo que él eligió. Pregunto ahora: ¿Han caído para no levantarse? Por supuesto que no. Por haber caído ellos, la salvación ha pasado a los gentiles, para dar envidia a Israel. Por otra parte, si su caída es riqueza para el mundo, es decir, si su devaluación es la riqueza de los gentiles, ¿qué será cuando alcancen su pleno valor? Hay aquí una profunda verdad, hermanos, y, para evitar pretensiones entre vosotros, no quiero que la ignoréis: el endurecimiento de una parte de Israel durará hasta que entren todos los pueblos; entonces todo Israel se salvará, según el texto de la Escritura: «Llegará de Sión el Libertador, para alejar los crímenes de Jacob; así será la alianza que haré con ellos cuando perdone sus pecados.» Considerando el Evangelio, son enemigos, y ha sido para vuestro bien; pero considerando la elección, Dios los ama en atención a los patriarcas, pues los dones y la llamada de Dios son irrevocables.
Palabra de Dios.
Lecturas obtenidas de www.ciudadredonda.org
Official readings of the Liturgy in English at http://www.usccb.org/nab/. You can get too Daily Scripture Readings at http://beingbob.wordpress.com/
Official readings of the Liturgy in English at http://www.usccb.org/nab/. You can get too Daily Scripture Readings at http://beingbob.wordpress.com/
El Señor no rechaza a su pueblo
Dichoso el hombre a quien tú educas, al que enseñas tu ley,
dándole descanso tras los años duros.
El Señor no rechaza a su pueblo
Porque el Señor no rechaza a su pueblo, ni abandona su heredad:
el justo obtendrá su derecho, y un porvenir los rectos de corazón.
El Señor no rechaza a su pueblo
Si el Señor no me hubiera auxiliado, ya estaría yo habitando en el silencio.
Cuando me parece que voy a tropezar, tu misericordia, Señor, me sostiene.
El Señor no rechaza a su pueblo
Dichoso el hombre a quien tú educas, al que enseñas tu ley,
dándole descanso tras los años duros.
El Señor no rechaza a su pueblo
Porque el Señor no rechaza a su pueblo, ni abandona su heredad:
el justo obtendrá su derecho, y un porvenir los rectos de corazón.
El Señor no rechaza a su pueblo
Si el Señor no me hubiera auxiliado, ya estaría yo habitando en el silencio.
Cuando me parece que voy a tropezar, tu misericordia, Señor, me sostiene.
El Señor no rechaza a su pueblo
Lecturas obtenidas de www.ciudadredonda.org
Official readings of the Liturgy in English at http://www.usccb.org/nab/. You can get too Daily Scripture Readings at http://beingbob.wordpress.com/
Official readings of the Liturgy in English at http://www.usccb.org/nab/. You can get too Daily Scripture Readings at http://beingbob.wordpress.com/
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo - Lucas (14,1.7-11)
Un sábado, entró Jesús en casa de uno de los principales fariseos para comer, y ellos le estaban espiando. Notando que los convidados escogían los primeros puestos, les propuso esta parábola: «Cuando te conviden a una boda, no te sientes en el puesto principal, no sea que hayan convidado a otro de más categoría que tú; y vendrá el que os convidó a ti y al otro y te dirá: "Cédele el puesto a éste." Entonces, avergonzado, irás a ocupar el último puesto. Al revés, cuando te conviden, vete a sentarte en el último puesto, para que, cuando venga el que te convidó, te diga: "Amigo, sube más arriba." Entonces quedarás muy bien ante todos los comensales. Porque todo el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.»
Palabra del Señor.
Lecturas obtenidas de www.ciudadredonda.org
Official readings of the Liturgy in English at http://www.usccb.org/nab/. You can get too Daily Scripture Readings at http://beingbob.wordpress.com/
Official readings of the Liturgy in English at http://www.usccb.org/nab/. You can get too Daily Scripture Readings at http://beingbob.wordpress.com/
Era ya muy anciano cuando fue elegido obispo de Jerusalén. Eusebio cuenta que, en su tiempo, los cristianos de este lugar recordaban todavía algunos de los milagros del santo obispo.
Por ejemplo como los diáconos no tuviesen aceite para las lámparas la víspera de la Pascua, San Narciso pidió que trajesen agua, se puso en oración y después mandó que la pusiesen en las lámparas. Así lo hicieron y el agua se transformó en aceite.
Algunos molestos por la severidad del santo, y por la disciplina que exigía en su diócesis, le acusaron de haber cometido un crimen.
Para no ser causa de conflicto decidió retirarse a la soledad. Ya no se supo más de él hasta que, durante el gobierno de Gordio, apareció nuevamente.
Como ya se sentía muy anciano para retomar el obispado, nombró a San Alejandro por coadjutor. Se dice que Narciso murió a los 116 años.
Santoral y lecturas confeccionados consultando el preparado por: www.churchforum.org.mx, corazones.org, aciprensa.com, franciscanos.org, eltestigofiel.org, webcatolicodejavier.org, santopedia.com, es.catholic.net, Archidiócesis de Madrid, ewtn.com, la Parroquia de la Sagrada Familia de Vigo, catholic.net, oremosjuntos.com